Editorial

Resumen

La economía ya experimenta reducción de los ingresos disponibles per capita, no sólo en dólares, sino en pesos. En efecto, si se suman las tasas de crecimiento demográfico (1.1%) y la de la productividad esperada (1.2-1.5%), todo indica que un ritmo de expansión del producto de alrededor de 2% no basta para evitar el descenso en el bienestar medio de la población, singularmente cuando la inversión es baja, se instrumentan recortes al gasto público ─con fines antiinflacionarios y de la balanza de pagos─ y prevalece una alta, insostenible concentración del ingreso (60% más del producto es absorbido por 10% de la población más rica). Esta es la otra gran falla de la estrategia económica nacional: la de deshumanizar el desarrollo